Hotel Beursstraat

positivo: El hotel está perfectamente situado y la cama es "comoda". Es lo único que se puede destacar favorablemente.

negativo: El hotel y la habitación sin duda alguna, va en proporción al precio. No puedes esperar unas grandes instalaciones ni mucho menos. El hotel es ideal para ir con colegas, ver la ciudad y dormir poco, que es lo que se suele hacer en este tipo de viajes. Es bastante escandaloso por la noches, pero lo dicho, el hotel es para dormir lo justo, que vas a Amsterdam!!!. No esperéis a que os hagan la habitación ni nada de eso... La limpieza en general del hotel deja mucho que desear, pero es ideal para conocer la ciudad y parar lo justo en el hotel. Si eres de culo fino, vé a otro hotel.

positivo: Ubicación, precio razonable.

negativo: Muy poco recomendable. La sensación general que transmite es de suciedad. De hecho llegamos a la habitación y había una colilla en el retrete. Pero eso es lo de menos. Cuando me fui de la habitación por primera vez cerré con una vuelta de llave, como hago siempre. Tuve que volver porque olvidé algo y en cuanto metí la llave me dí cuenta de que ya no había vuelta de llave. O sea, alguien entró en la habitación en ese rato, cosa que no me hizo ninguna gracia, sobretodo teniendo en cuenta que te obligan a dejar la llave en recepción antes de irte (y no entraron a limpiar porque habíamos llegado hacía apenas media hora). Al día de irnos nos vinieron a despertar a eso de las 9 de la mañana para que les diésemos la llave de antemano, muy poco correcto la verdad. Sensación de dejadez, entraron en la habitación al poco de que llegásemos.

positivo: Hotel funcional y barato. Un hotel adecuado para la gente que no le importe el aspecto ni los lujos. Es de un estilo albergue pero con baño propio en la habitación. La habitación y las camas son pequeñas pero nosotros dormimos muy bien (las camas son duras y van bien para la espalda). Es un hotel silencioso aunque igual en verano hay que tener la ventana abierta y la calle donde está es ruidosa. Ubicación perfecta: entre la estación Central y la Plaza Dam. El único pero podría ser que las toallas que ponen son de mano y que la cortina del baño no tapa del todo con lo que se sale el agua. Aunque hay un desague debajo del lavabo para evitar que se encharque el baño. Ideal para escapada de 3-4 dias con los colegas. Mención especial a la cacho de escalera de caracol que hay para subir al primer piso. Ubicación y relación calidad/precio.

negativo: Toallas y cortina del baño.

negativo: Perfectamente situado en el centro, habitaciones pequeñas pero correctas, escaleras estrepitosas muy muy estrepitosas, recomendable para breves estancias y sobretodo gente joven.

negativo: Cuando llegamos la habitación estaba sin limpiar, con el baño bomitado, no soy una persona muy pisquis pero el hotel era muy pero que muy cutre.

negativo: El hotel está en la mejor zona posible, a 5 minutos andando de la estación de tren. Está situado en el barrio rojo, y cerca de la plaza Dam, hay tambien en la misma calle una comisaría, alquiler de bicis, todods los sex shop y bares del barrio rojo, aun que la zona de fiesta está algo más alejada. Las camas, son muy pequeñas pero cómodas, no se pueden recibir visitas, el dia de salida hay que dejar la habitacion a las 10:30, hay un campanario cerca que algunas veces se escuchan las campanas.

positivo: Hotel muy cercano a la estación de tren y en pleno barrio roja. La relación calidad/precio es muy buena. Es un hotel sencillo, sin ningún lujo, pero para dormir está muy bien. Estuvimos en una habitación para tres, y las camas estaban bien las 3, el baño pequeñito y sin ningún lujo (te ponen toallas pero de las de aseo, y no hay jabón, ni champú...) pero el agua sale muy calentita. Muy buena calefacción, muy amables los empleados y te dejan fumar en las habitaciones.

negativo: Es un hotel sólo para ir a dormir. Está muy muy bien situado y la calle es tranquila. Lo que es el hotel deja mucho que desear, sobre todo por su precio. Pedimos habitación con cama doble y nos dieron una en la que había dos camas separadas y poco más. Limpieza pasable y trato bastante bordes. Las paredes son finísimas y una noche nos tocó aguantar la fiesta de los de al lado. Cuando volvamos a Amsterdam intentaremos reservar en algún otro de la zona.